miércoles, diciembre 14, 2005

Congelar el parque automotor de vehículos privados en la ciudad no es el camino correcto


Aunque en términos absolutos y también relativos la cantidad de contaminantes que emiten al ambiente el millón de vehículos particulares que circulan a diario por las calles de Bogota es insignificante frente al las emisiones contaminantes de los 32.000 vehículos de transporte publico colectivo (incluyendo la oferta ilegal de toda la ciudad), los 465 articulados de Transmilenio y los 1000 buses alimentadores. Por eso los mayores esfuerzos para reducir los niveles de contaminación ambiental deben estar orientados, a la minoría, en este caso a los vehículos de transporte público colectivo a través de la chatarrización. Aunque no estoy de acuerdo con convertir a Bogotá en ciudad con mercado negro de cupos de vehículos privados, si es cierto que es necesario tomar medidas para frenar el desmedido crecimiento del parque automotor de nuestra ciudad, pero para esto no es necesario intervenir la cadena económica asociada a los vehículos (lo cual resultaría bastante dañino para la ya debilitada y transgredida economía del país) , sino mas bien establecer los modelos económicos para el cobro de tarifas razonables aplicadas al uso del automóvil particular como medio de transporte. Así cada vehículo que circule debe pagar los costos asociados a la congestión (peajes urbanos), a la contaminación (tasas impositivas que se incrementan por cada año de operación de los vehículos hasta alcanzar valores exagerados que impliquen la necesidad de poner fuera de circulación vehículos viejos), al uso de las vías y del sistema de tránsito y transporte de la ciudad (impuestos de rodamiento acordes con el desgaste que las vías sufren por el tráfico excesivo de vehículos de acuerdo con sus ejes equivalentes) para reinvertir estos recursos en la casi destruida malla vial de Bogotá. Adicionalmente a todos los vehículos deben cargársele los costos sociales asociados al tráfico. Es decir, si el gobierno distrital esta orientando todos sus recursos y esfuerzos al transporte público lo mas lógico es que cada ciudadano perciba los beneficios económicos que se derivan de emplear el Sistema Integrado de Transporte Masivo y el Transporte Público Colectivo como su medio de transporte regular.

6 Comments:

Blogger ::::W:::: said...

me encantó la foto de "Absolut Bogotá".

Es tuya?
o puedes poner el crédito de origen en caso contraio?

Un saludo

4:26 p. m.  
Blogger doppiafila said...

Buenisima la foto!!! Me encantaria poderla usar en mi blog (bogotalia.blogspot.com) que tambien es sobre bogotà: me autorizas?
Muchas gracias, felicitaciones y... pasarè a leer tu blog!
Doppiafila

8:20 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

definitivamente la foto causa sensacion, aun mas cuando un producto extrangero es combinado con lo que es una realidad bogotana y ya los huecos hacen parte de nuestro entrenamiento de pilotos.

12:10 p. m.  
Blogger 2600 METROS said...

Andrea... han hecho falta tus nuevos post... por favor, aparece de nuevo!

3:41 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Transmilenio:

solución subdesarrollada

Bogotá con 7 millones de habitantes debería tener un metro, pero los ladrones de cuello blanco de los partidos tradicionales habían saquedo sus arcas y le tocó conformarse con un transporte masivo de superficie. Quedó rezagada de Ciudad de México, Río, San Pablo, Santiago o Caracas.

Transmilenio no es una empresa de los bogotanos, desafortunadamente. Es una empresa privada que se aprovecha de la inversión de todos los bogotanos en las vías. Varios de los principales dueños de Transmilenio eran los mismos grandes dueños de los buses viejos, como Sidautos y demás.

Nuestros hijos tendrán de todos modos que hacer el metro, como San pablo que empezó con Transmilenio y tuvo después que hacer su Metro. Ahora allá el Transmilenio va para chatarra, mientras aquí los culebreros nos lo pintan como el últmo descubrimiento de la alta tecnolgía criolla.


¿A quién le sirve Trasmilenio?

Una simple comparación con el excelente Metro de la ciudada de Caracas, un verdadero sistema de transporte masivo y moderno, de facil acceso para todo el pueblo por sus bajas tarifas (300 pesos colombianos), ampliado por el Presidente Chavez con nuevas rutas y complementado con el maravilloso tren de los Valles del Tuy, pone al descubierto la farsa de Trasmilenio. Peor viendo su acelerado deterioro por el fraude en su construcción, llena de chanchullos y peculados.

Trasmilenio no le sirve a millones de Bogotanos, eso lo estamos viendo todos los usuarios. T. es una multimillonaria inversión con presupuesto del Distrito que favorece única y exclusivamente a poderosos clanes del transporte capitalino. Se adecuaron avenidas y se redujo el espacio publico, para que un puñado de oligarcas invirtieran en unos buses y extraer asi millones y millones de pesos, haciendo caso omiso del bienestar de millones de trabajadores y ciudadanos pobres de Bogota.

8:17 p. m.  
Anonymous vehículos siniestros said...

Saludos. Los programas de chatarrizacion son muy buenos pero a medida de que den y ofrezcan facilidad para comprar un nuevo vehículo con facilidades de pago e intereses muy bajos y sin tanta documentación.

3:17 p. m.  

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